El último deseo

Una novela hecha de un diario sobre una joven con cáncer...todo narrado desde su punto de vista desde lo más profundo de su ser.

lunes, 12 de marzo de 2012

Domingo 11 de enero 2011



Son las diez de la mañana y sigo acostada en la misma cama pero mis papás están con los doctores al otro lado de la habitación.Los doctores les explicaban que únicamente con un transplante de médula podría curarme pero en mi familia nadie era compatible conmigo aparte de que la operación era muy arriesgada.Mis papás insistían que me pusieran en la lista de espera para que alguien me donara su médula, sin embargo, dijeron que tardarían mucho para encontrar un donante compatible pero mis padres aun así aceptaron ya que no había otra opción. 
Después de que me explicaron lo mismo a mi, mi papá se tuvo que ir al trabajo y mi mamá se quedo conmigo en el hospital. Cada hora iba la enfermera a checar como me encontraba y para la comida me pusieron suero, en ese momento solo me imaginaba el sabor de uno de los guisados de mi mamá pero eso no bastaba para sastisfacer mi hambre.  
Por más que mamá trataba de estar al tanto de mi, su cansancio no la dejo así que terminó durmiéndose en la silla. Yo también estaba muy cansada pero el extraño dolor que sentía por dentro no me dejaba ni cerrar los ojos, lo único que quería era regresar a casa y dormir en mi cama. Apenas llevaba un día en el hospital y parecían semanas. 
Ya eran las ocho de la noche cuando regreso mi papá del trabajo, muy agotado, se acerco a mi y me dio un beso en la frente al igual que a mi mamá, que seguía durmiendo. Después fue con el doctor y éste le dijo que hasta ahorita parecía estar estable por lo que no tardarían en darme de alta, pero también le aclaro que almenos cada semana tenía que ir a revisión para asegurar que todo fuera bien, mas aparte tenía que ir a quimioterapia dentro de tres meses. 
A las nueve de la noche me dieron de alta, me sacaron en silla de ruedas del hospital hasta el auto,aunque yo insistía que ya podía caminar bien. Durante todo el camino a casa nadie dijo ni una sola palabra y,en cuanto llegamos, me fui a mi habitación después de darles las buenas noches a mis papás. Ellos se quedaron en la sala hablando y llegue a escuchar que mi papá le decía a mamá que todo iría bien siempre y cuando estuvieramos juntos, que no se angustiara pero al parecer mamá lloraba en silencio puesto que temía que no fuera así.
Estando al fin acostada en mi cama por alguna razón mi mente no dejaba de pensar...¿qué pasará mañana que tengo clases?¿qué dirán mis amigos?,tengo miedo a que ya no me traten como a la Jade de siempre solo por tener cáncer...